Nueva York, 6 de junio de 2023 - Según un nuevo informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), se estima que aproximadamente 1.6 millones de personas en todo el mundo enferman cada día debido a la ingesta de alimentos contaminados. Este preocupante dato resalta la importancia de la seguridad alimentaria y la necesidad de mejorar los estándares de higiene en toda la cadena de suministro de alimentos.
El informe, elaborado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), revela que las enfermedades transmitidas por alimentos son una carga significativa para la salud global. Se estima que cada año, aproximadamente 600 millones de personas, es decir, casi una de cada diez personas en el mundo, se enferman por consumir alimentos contaminados.
Las enfermedades transmitidas por alimentos pueden ser causadas por bacterias, virus, parásitos, toxinas y productos químicos presentes en los alimentos. Los síntomas pueden variar desde leves molestias gastrointestinales hasta enfermedades graves e incluso la muerte. Los grupos más vulnerables, como los niños pequeños, las personas mayores y aquellos con sistemas inmunológicos debilitados, son especialmente susceptibles a estas enfermedades.
El informe de la ONU destaca que la falta de acceso a agua potable, saneamiento inadecuado, prácticas deficientes de higiene y un sistema de control de alimentos insuficiente son factores clave que contribuyen a la contaminación de los alimentos. Además, los cambios en los patrones de producción y consumo de alimentos, como la globalización y el aumento de la producción industrial, también han aumentado los riesgos de contaminación.
El Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS, enfatizó la necesidad de abordar esta problemática global: "La seguridad alimentaria es fundamental para la salud y el bienestar de las personas. Necesitamos un enfoque integral que involucre a todos los actores, desde los agricultores y los productores hasta los gobiernos y los consumidores, para garantizar que los alimentos que llegan a nuestros platos sean seguros y saludables".
La ONU está trabajando en estrecha colaboración con los gobiernos y las partes interesadas para promover la seguridad alimentaria y mejorar las prácticas de higiene en todas las etapas de la cadena alimentaria. Se insta a los países a fortalecer sus sistemas de vigilancia y control de alimentos, promover la educación en materia de higiene alimentaria y fomentar la colaboración entre los sectores público y privado para garantizar la seguridad de los alimentos.
A medida que aumenta la conciencia sobre los riesgos de la comida contaminada, se espera que se tomen medidas más sólidas a nivel mundial para abordar este problema. La promoción de prácticas seguras de producción, procesamiento y manipulación de alimentos es esencial para proteger la salud de las personas y reducir el impacto de las enfermedades transmitidas por alimentos en todo el mundo.
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