5 afirmaciones sobre la cerveza que no son ciertas

Servir una cerveza helada no sería la mejor forma de apreciar su sabor.


 La cerveza es de las bebidas alcohólicas preferidas por los estadounidenses. La popular bebida milenaria está rodeada de algunas afirmaciones y mitos que carecen de respaldo científico.

Mito 1. La cerveza siempre debe servirse helada

La cerveza debe servirse alrededor de 44 grados Fahrenheit (con un poco de margen dependiendo del tipo de cerveza). La cerveza fría adormece el paladar. No se saborea realmente la cerveza ya que las papilas gustativas pierden el sabor de la bebida.

Mito 2. La cerveza embotellada es mejor que la enlatada

Muchas personas suelen pensar que las botellas de vidrio contienen mejor cerveza que las latas. Sin embargo, las latas pueden preservar mejor la calidad de la bebida ya que la cerveza es extremadamente sensible a la luz. Los compuestos de lúpulo son fotosensibles.

“Las latas brindan la mejor protección contra el oxígeno y la luz. El diseño de una lata tiene un espacio mínimo entre la tapa y la cerveza, lo que ayuda a reducir la cantidad de oxígeno en el interior”, comparte Bison brew.

Mito 3. Las cervezas oscuras son más fuertes que las cervezas claras

El hecho de que una cerveza sea oscura no significa necesariamente que tendrá más alcohol. El color de la cerveza está relacionado con el tueste de la malta que se usa. “El tueste más oscuro produce colores marrón y negro claro y sabores a chocolate y café…Los tuestes más pesados producen color negro y sabores quemados”, explica Caft Beer.

Mito 4. La cerveza te dará barriga cervecera, pero otras bebidas alcohólicas no

Existe la afirmación de que el alto consumo de cerveza puede favorecer el desarrollo de una “barriga cervecera”, y esto es muy probable, pero el aumento de barriga puede ser consecuencia de beber demasiado de cualquier bebida alcohólicaNo solo se debe a la ingesta de calorías, también a la manera en la que se metaboliza el alcohol.

Mito 5. Beber cerveza en la botella es mejor

Beber directo de la botella, con una botella tan pequeña no permite que el olfato pueda apreciar el olor de la cerveza como lo puede permitir el beberla servida en un vaso o copa. Cuando los aromas de la cerveza se volatilizan se pueden apreciar mejor sus cualidades organolépticas.

Fuente: El Diario NY

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