El superintendente de Bancos, Alejandro Fernández, volvió a tocar el tema de Wilkin García “Mantequilla”, quien ha establecido un polémico esquema de captación de inversiones donde garantiza duplicar la cantidad de dinero que recibe en un mes.
Al ver el revuelo mediático que ha causado el negocio de Mantequilla, Fernández dedicó un hilo de tuits para pedirle al joven de 34 años que desmonte el cuestionado negocio, que ha calificado como un "esquema ponzi más".
Lo convidó a acercarse a la magistrada Karina Concepción de la Procuraduría de Delitos Financieros.
“Lo mejor que Wilkin puede hacer es acercarse a ella y procurar desmontar esta situación de la manera más ordenada posible”, declaró.
Indicó que con requerimiento de la magistrada él podría acompañarlos en el proceso de investigación, “para entender la magnitud del problema y ver cómo se desactiva esta lamentable situación con el menor impacto”.
Fernández dijo que el caso de Mantequilla lo llena de vergüenza y pena, por "la fragilidad humana, la ambición, la ignorancia y la incapacidad de poder actuar". Aseguró que no se ha reído de ninguno de los memes que inundan hoy las redes sociales.
El experto en economía expresó que con el montaje de este “negocio” y su promoción, Mantequilla, desconoce en qué problema se ha metido.
Dice será objeto de investigación
“Se ha metido en un lío de un tamaño que él no puede ni imaginarse. Esa cantidad de efectivo que él ha estado manejando será objeto de investigación, o por lavado de activo o por el lado impositivo. Quién sabe los compromisos que ya él ha asumido y que, esto lo pueden escribir por ahí, el no podrá cumplir más temprano que tarde”, manifestó.
El funcionario dijo que le causa pesar que un joven, que posee talento para comunicar y empatizar con la gente, “alcanzara reconocimiento mediático en tan poco tiempo por estructurar un vulgar esquema ponzi más”.
Y es que inició su hilo de tuits explicando el aparente nexo personal con Mantequilla, quien resultó ser vecino de Eugenia, la mujer que fue niñera del funcionario.
“¿Adivinen de quién era vecina Eugenia, aquí en Santo Domingo, en el barrio cerca de la casa de mis padres? De la familia del mismísimo Wilkín García, hoy famoso como Mantequilla. Eugenia también fue a rezos por la mamá de Wilkin, cuando enfermó, pues ambas eran cristianas”.
Vía | Diario Libre
0 Comentarios