Cuatro jóvenes resultaron heridos y otras cuatro personas fueron arrestadas después de que agentes de la policía de Nueva York que monitoreaban una fiesta masiva anoche en una casa de Queens intercambiaron balas con un grupo que comenzó a disparar contra los presentes.
La violencia estalló anoche alrededor de las 11:35 p.m. en 219th Street y 130th Avenue en Springfield Gardens. Los heridos fueron hombres jóvenes de 16, 17, 18 y 24 años. Tres fueron al Hospital Jamaica y el otro fue al Cohen Children’s Medical Center. Los cuatro fueron reportados en condición estable, dijo la policía hoy.
Los cargos estaban pendientes contra los arrestados en la fiesta, donde había unas 100 personas, según New York Post. Los detectives aún está averiguando si los policías hirieron a los sospechosos o fueron los pistoleros que llegaron a la fiesta.
Los oficiales vestidos de civil en vehículos sin identificación estaban observando la fiesta porque temían un “potencial de violencia por parte de algunos de los grupos callejeros locales”, dijo la policía.
El jefe de patrulla Jeffrey Maddrey dijo en una conferencia de prensa nocturna que ningún oficial resultó herido en el intercambio de disparos. La policía recuperó tres armas de fuego de la escena.
Dos de los presuntos pistoleros que abrieron fuego contra el evento estaban acusados de otros casos, incluido un robo y un incidentes con armas, dijo una fuente policial.
“No se equivoquen, la vida de los detectives corre grave peligro cuando van a trabajar a esta ciudad. Los políticos, fiscales y jueces que están liberando a las personas violentas de vuelta a las calles, combinados con leyes fallidas como “elevar la edad”, están poniendo en peligro a los mismos detectives que arrestan a estos reincidentes, y a los neoyorquinos a los que sirven valientemente. Y estos funcionarios siguen sin rendir cuentas como los delincuentes”, dijo Paul DiGiacomo, director de “Detectives’ Endowment Association” (DEA).
En NYC la violencia armada continúa desatada en 2022, especialmente con jóvenes atacantes y victimarios, poniendo un gran reto al nuevo alcalde Eric Adams, quien desde que asumió el cargo en enero ha encontrado obstáculos dentro de su propio partido demócrata y líderes de “Black Lives Matter” (BLM) para enfrentar la crisis.
Específicamente en julio los asesinatos experimentaron un aumento del 35% en comparación con el mismo mes del año pasado, pasando de 31 a 42 casos. Las víctimas de disparos y los incidentes con armas también subieron casi 10%.
El auge de tiroteos confirma los temores de los expertos de que Nueva York iba a vivir un auge de violencia este verano, tanto con armas de fuego como blancas.
Fuente: El Diario NY
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